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domingo, 29 de abril de 2012

2012: ¿El regreso del dinosaurio, continuidad o cambio? Parte III.

Bienvenidos a una nueva entrada en el blog, amables lectores. Continúo con la serie de los candidatos a la Presidencia de la República, para que los conozcan más a fondo y decidan (quienes radican en la República Mexicana y nuestros paisanos en el extranjero) quién será quien gobierne los destinos del país durante los próximos seis años. Ahora, toca el turno amarillo.

Andrés Manuel López Obrador (PRD-PT-Movimiento Ciudadano).

Quizá el más veterano de los cuatro candidatos, porque nació en Tabasco (más específicamente, en Macuspana) en 1953, López Obrador hereda la tradición perredista de postularse en varias ocasiones para el mismo puesto.

Es hijo de comerciantes, que vivían de forma modesta en Tabasco, pero que pudieron ofrecerle una educación buena. Llegó a la Ciudad de México para estudiar en la UNAM, donde comenzó a involucrarse en algunos pequeños grupos que perseguían los ideales socialistas de aquél entonces (más o menos, la década de los 70).

Conoció a varios de los principales líderes priístas y se afilió al partido. Ocupó diversos cargos públicos durante el tiempo que estuvo en el tricolor y, se dice también que fue quien compuso el himno del PRI. Su actitud trabajadora y hasta cierto punto servil, la heredó desde muy chico, cuando ayudaba a su familia a administrar los pequeños negocios que tenían. Igualmente, de su juventud temprana le viene la costumbre de madrugar, misma que mantiene con sus "conferencias matutinas", que llevó a cabo durante los cinco años que gobernó la Ciudad de México (2000-2005) y que le valieron una fama de ser político tempranero.

En las elecciones de 1988, apoyó al Ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas como posible candidato del PRI a la Presidencia de la República. Sin embargo, debido a que se postuló a Carlos Salinas de Gortari para suceder a Miguel De la Madrid en Los Pinos, Cárdenas se separó del PRI y fundó el Frente Democrático Nacional, del cual López Obrador fue militante desde sus inicios. Esta asociación política, antecedente del PRD, que se fundó en 1989, lanzó al propio Andrés Manuel como candidato a Gobernador de su estado natal, Tabasco. No ganó la elección, pero tampoco se dio por vencido. Su crítica al PRI, así como los diferentes apoyos que realizó para hacer que varias comunidades marginadas pudieran progresar poco a poco, fue lo que finalmente lo sacó del partido.

En 1989 fue electo Presidente del PRD, y fue en 1994 cuando volvió a contender por el gobierno de Tabasco, esta vez, enfrentándose a un candidato que, si bien era priista, no contaba con el apoyo completo de la Presidencia de Ernesto Zedillo. Su nombre: Roberto Madrazo. A pesar de que fue una elección competida, finalmente se le dio el triunfo al PRI. Ello hizo que López Obrador se inconformara y llegara a realizar una marcha hacia el Zócalo de la Ciudad de México para presionar al Gobierno Federal de anular la elección (con supuestas pruebas que daban a conocer los excesivos gastos de campaña de Madrazo). Zedillo no hizo nada por revertir el resultado. Sin embargo, negoció tanto con los triunfadores de la elección como con el movimiento lopezobradorista, para evitar un levantamiento civil en el propio Distrito Federal o en Tabasco.

En 2000, después de una reforma al Estatuto de Gobierno del Distrito Federal realizado por la primera Asamblea Legislativa (en la que rindió protesta el Ingeniero Cárdenas como Jefe de Gobierno en 1997), se estipuló que quien llegara a gobernar la capital de la República ocuparía el cargo seis años y no tres como se había realizado. Para esa contienda, estaban postulados, por el PAN, Santiago Creel Miranda; por el PRI, Jesús Silva-Herzog; y el PRD tenía una elección interna, donde los candidatos eran Demetrio Sodi, Pablo Gómez y el propio López Obrador. Contra todas las adversidades y pronósticos, López Obrador logró la candidatura y abanderó al partido del sol azteca para dichos comicios. El "Efecto Fox" se sintió en el Distrito Federal, porque la elección para Jefe de Gobierno de ese año fue la más competida. López Obrador apenas le ganó por un 1.3 % a Santiago Creel, del PAN, quien una vez siendo Vicente Fox presidente, llegó a ocupar la Secretaría de Gobernación.

Pronto, el Jefe de Gobierno del DF se convirtíó en una piedrita en el zapato del Presidente Fox, primero, quitándole popularidad a su gobierno, y después, siendo una suerte de rival del Ejecutivo nacional. Y no era para menos, debido a que el mandatario capitalino se había ganado la simpatía de la población chilanga gracias a las acciones y programas sociales que comenzó a ejecutar, mismas que, en cierta medida, opacaron (por lo menos en la Ciudad de México) al programa federal Oportunidades.

Pero la controversia del tabasqueño no se hizo esperar. Entre tantas cosas, porque se decía que durante su mandato, la Ciudad se endeudó a niveles inimaginables y porque, aunque Vicente Fox había decretado que el Gobierno Federal y los estatales transparentaran sus acciones, la capital de la República era la única entidad (o de las únicas) que jamás pusieron a los ojos del público los ingresos, egresos, contratos, etc., que exigía ya la Ley de Transparencia.

La confrontación Fox-López Obrador llegó a los niveles de que, durante el tiempo que gobernaron ambos mandatarios a nivel federal y local respectivamente, éste último se negó a implementar el Seguro Popular en la Ciudad de México. A cambio de ello, los capitalinos que no contaban con Seguro Social o afiliación al ISSSTE, debían casi forzosamente asistir a las instituciones de salud del Gobierno del Distrito Federal. La cereza del pastel para el Gobierno Federal en contra de López Obrador, fue hallar un supuesto desacato de una resolución judicial por parte del GDF, lo que desembocaría en un juicio político contra el propio Jefe de Gobierno y su inminente desafuero. Fue así que en Abril de 2005, la Cámara de Diputados realizó dicha acción en contra de López Obrador, quien estuvo a punto de ingresar al Reclusorio. Sin embargo, la acción de diputados como Gabriela Cuevas, del PAN, y otros más que ayudaron a pagar la fianza del tabasqueño, impidió su encarcelamiento. En estas fechas, Juan Pablo II había muerto y López Obrador diría que "le daban más tiempo de televisión al Papa que a su desafuero", con lo que comenzaba su tesis de la inequidad en los medios.

Previo a su desafuero, en 2004, el gobierno de López Obrador había recibido otro golpe, debido a que miembros de su gabinete o cercanos a él (entre los que estaban Carlos Ahumada, René Bejarano y Gustavo Ponce [Secretario de Finanzas del GDF]) se veían inmiscuidos en unos videos, donde se observa que están recibiendo dinero o gastándolo. Supuestamente la recepción de efectivo sería para financiar algunas campañas, y en el caso de Ponce, que se fue a Las Vegas siendo funcionario del gobierno capitalino, el despilfarro sería con dinero recaudado de la propia dependencia. Otros más que fueron captados en esas situaciones, fueron los Jefes Delegacionales en Gustavo A. Madero y Tlalpan, Octavio Flores Millán y Carlos Imaz Gispert, respectivamente. El primero, huyó dejando el cargo vacante y el segundo, enfrentó en un tiempo a la justicia.

Con todos los tropezones, López Obrador renunció a la Jefatura de Gobierno del Distrito Federal en 2005, dejando a Alejandro Encinas en el cargo, y comenzó su campaña por la Presidencia en 2006. Sería el puntero en las preferencias electorales hasta que el PAN eligió a Felipe Calderón como su candidato. La campaña albiazul se basó en el desprestigio del tabasqueño y llegó a tener efectos, puesto que ambos candidatos se acercaron en las encuestas. Quizá la negativa de López Obrador de asistir a uno de los debates, fue algo que le pudo propinar un golpe bajo a su campaña. El 2 de Julio de 2006, día de la votación, el Instituto Federal Electoral, en voz de Luis Carlos Ugalde, su presidente, no declararía ganador de la elección. Sin embargo, el miércoles siguiente, se definía que Felipe Calderón, el candidato del PAN, había triunfado y sería el próximo presidente. A partir de ahí se inició una campaña de desprestigio del IFE por parte de López Obrador y el punto culminante fue el bloqueo sobre el Paseo de la Reforma, que duró casi el último semestre de 2006, hasta que, en Noviembre de ese año, y ya habiendo sido declarado presidente electo Felipe Calderón por el Tribunal Electoral del Poder Judicial, López Obrador "tomó protesta" como "Presidente Legítimo de México" en el Zócalo de la Ciudad de México.

Este 2012, Andrés Manuel López Obrador llega como ave fénix, quizá con una fuerza menor que en 2006, o tal vez con una mayor. ¿O ustedes, qué opinan amables lectores? Agradeceré sus comentarios.

1 comentario:

Anónimo dijo...

es un tranza corrupto y habla de moral tirandole a peña nieto primero que lo compruebe el dinosaurio y ademas habla de 70 años de corrupcion cuando el formo parte de esos 70 años del pri corrupto en videos y ademas hablador