Bienvenidos a una nueva entrada en mi blog, amables lectores. Es la segunda del 2012, realizada apenas un día después de la llegada de los Reyes Magos, que será de lo que trataré en las próximas líneas, para que, como siempre, me den su opinión respecto a lo que les comentaré, y que fue una situación curiosa, sin precedentes, y que, aunque no fue masiva, sí logró su objetivo: ayudar. Me refiero al "Juguetweet".
Prácticamente, de un tiempo acá, me he vuelto asiduo lector de las cuentas de Twitter que sigo, en donde lo mismo leo los famosos "poetuits" (que son frases que escriben en tono "poético"), "sextuits" (frases con contenido sexual), así como noticias, chismes, etcétera. Pero hace unas semanas, me llamó la atención una propuesta que estaban organizando a través de dicha red social, y cuyo principal objeto sería donar juguetes a los niños pobres o de alguna organización de beneficencia, casi como lo hace año tras año Televisión Azteca (hoy llamada "Azteca").
Bajo el nombre de "Juguetweet" (entendiendo que esta propuesta se realizaba a través de Twitter), algunos de los usuarios que tienen más seguidores dentro de la red social, convocaron por esa vía y a través de un blog a miembros de la comunidad twittera a reunirse en algunos puntos de las principales capitales de los Estados, como Guadalajara, Monterrey, Puebla, Pachuca, el propio Distrito Federal, entre otras más, acercarse a quienes participarían como voluntarios oficiales de la cruzada, y donar juguetes.
La respuesta fue poca al inicio, tal como lo mencionarían en su propia página, misma que iba sufriendo cambios conforme se acercaba el día de Reyes para actualizar la información referente a los horarios, lugares y miembros del Juguetweet que serían representantes en los estados. Pero el espíritu de esperanza y confianza no decayó, así que invitaban a quienes ya estaban enterados de la propuesta a que si no podían donar un juguete en los lugares establecidos, lo hicieran directamente con los niños pobres que vieran o que fueran a alguna institución a colaborar; además, los organizadores pidieron que utilizaran el hashtag (entiéndase por este término un tema específico que se intenta poner en común en Twitter, siempre va precedido por el signo "#") #Juguetweet, para así poderlo "esparcir" a otros usuarios de dicha red y así poder contribuir de manera virtual.
La meta esperada por el Juguetweet era llegar a casi 50,000 juguetes, distribuidos en las ciudades donde había voluntarios que lo apoyaban. Y aunque no se llegó a dicha cantidad, al final del 5 de Enero, fecha en la que se realizó el evento en general (aunque lugares como Chihuahua continuaron la recolección el 6), se daba cuenta de que, en algunos puntos, se llegaron a recabar poco más de 400 juguetes, que si se sumaran con las demás sedes, ya llegarían a los miles recaudados.
Más allá de haber o no llegado a la meta, el Juguetweet demostró que las redes sociales pueden contribuir y/o despertar inquietud de colaboración con las demás personas sin necesidad de que haya intervención gubernamental, mediática o de otra índole, donde siempre los primeros beneficiados son ellos y no las causas a quienes van dirigidas. O ustedes, ¿qué opinan, amables lectores? ¿Participaron en esta cruzada? ¿Colaborarían en próximas ediciones [si las hay]? Agradeceré sus comentarios.
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